Las leyes que se dictan pueden ser favorables en teoría, pueden favorecer la inversión, pero lamentablemente gracias a la normatividad se cometen excesos y en el Cusco somos testigos de aberraciones que se han cometido y por ello se expresa un total rechazo a los dispositivos que señalan fomentar la inversión privada en zonas contiguas a los monumentos del patrimonio cultural. 
Cusco, ha tomado conocimiento que en las obras de edificación de un centro comercial ubicado en la esquina de las calles Maruri y Loreto y que esta a cargo de la empresa Miñano Y baca Proyectos e Inversiones S.R.L., ha sido destruido un muro histórico construido en los primeros años de la invasión española utilizando técnica ancestral precolombina y que estaba faccionada con piedras incas.
El Instituto Nacional de Cultura mediante la Comisión Alterna a la Comisión Nacional Técnica de Arqueología, mediante opinión 038 – 2007 del 28 de diciembre del año pasado, recomienda la puesta en valor del referido muro y encarga a la gerencia de Desarrollo Urbano de la Municipalidad del Cusco ha efectuar el seguimiento estricto para que una vez emitida la licencia de demolición correspondiente proceda a fiscalizar todas las acciones necesarias para la preservación del vestigio histórico.
Sin embargo los funcionarios de la mencionada dependencia arquitectos Jorge Cardenas Cuba (gerente) y Manuel Ollanta Aparicio (director de oficina del Centro Histórico), no cumplieron con sus funciones y gracias a la irresponsabilidad, el indicado muro ha desaparecido.
Además a consecuencia de las obras se ha debilitado el muro del convento de Santa Catalina que colinda con la construcción, cabe precisar que el proyecto del denominado centro comercial Ima Sumaq considera la construcción de un sotano y tres pisos de oficinas, cuenta con licencia municipal de construcción aprobada por la comisión de edificaciones el 2007.
Diario del Cusco
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