La cotización del crudo aumentó, luego de que el Departamento de Energía estadounidense reportara una imprevista y fuerte caída en los inventarios de petróleo en ese país.
Además, algunas refinerías fueron cerradas y las importaciones de petróleo cayeron. En tanto, se reportó que los suministros de gasolina se redujeron en 6,39 millones de barriles, hasta llegar a los 202,8 millones la semana pasada. Esto supone el mayor descenso desde octubre de 2002 cuando el huracán Lili y la tormenta tropical Isidore perturbaron la producción a lo largo del Golfo de México.
Por su parte, el crudo para entrega en el mes de septiembre aumentó 2,60 dólares, o 2,35 por ciento, situándose en los 115,67 dólares por barril en la Bolsa Mercantil de Nueva York. Antes de la publicación, el petróleo cotizaba en 113,88 dólares por barril. A su vez, las refinerías operaron a 85,9 por ciento de su capacidad, 1,1 puntos porcentuales menos que la semana anterior, precisó el informe.
Se reportó también que las importaciones de derivados del petróleo cayeron un 17 por ciento, hasta los 2,6 millones de barriles diarios, el nivel más bajo desde la semana que terminó el 1 de abril de 2005, mientras que las importaciones de petróleo crudo disminuyeron 5.3 por ciento, a 9,66 millones de barriles diarios, el nivel más bajo desde la semana que terminó el 4 de julio.
El contrato alcanzó ayer el valor más bajo en 14 semanas, luego de la fuerte recuperación del dólar y alcanzó a tocar los 110 dólares. De esta forma lleva perdidos casi 40 dólares desde que alcanzara el récord de 147,27 dólares por barril el 11 de julio.
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